EL INFORME COLUMBRETES

(Parte 2 de 3)
Diario de bitácora 2º día
El 2º día se inició sin acabar el primero, cuando vinimos de cenar y antes de irnos a dormir nos reunimos en la bañera del Ñeque para planificar la siguiente jornada, Jaume y Ramón fueron a disfrutar de su merecido descanso, y Mosi y yo nos quedamos para acabar él ultimo cigarro y charlar, cuando vimos que un velero, en plena noche, levaba anclas, con una mirada nos pusimos de acuerdo, no esperaríamos al amanecer. Consultamos rápidamente la carta para trazar un rumbo, y sin hacer ruido nos pusimos manos a la obra, fuera amarras, un empujoncito, y fuera del muelle. Al poner el motor en marcha el “capi” nos pillo, pero le pareció buena idea para ganar tiempo, la navegación nocturna fue emocionante y preciosa y ver el amanecer navegando, espectacular. A media mañana llegábamos a las Columbretes, la primera impresión al entrar en ese circo rocoso fue estupenda, y mejor aun cuando pudimos escoger la bolla de fondeo, y tener una vista esplendida de toda la cumbre del volcán.

Pudimos bucear y ver grupos de barracudas, algún mero, pulpos, y contemplar una variedad del coral rojo y unas algas laminarias singulares.
A la hora de comer, y cocinando una pizza en el horno, Ramón convenció a unos vecinos abarloados, que cocinasen la lubina para cenar con la excusa que nosotros nos habíamos quedado sin gas butano, ¡GLUPS ¡, no percibieron el olorcillo del queso derritiéndose.

A la tarde más buceo y paseos con la zodiac. Cenamos en el barco de los vecinos, y compartiendo pescado, buenos caldos de rioja y otras viandas, pasamos un rato muy divertido y agradable explicando aventurillas.
Al igual que la noche anterior, la partida no se hizo esperar.
Empezaba otra singladura excitante.